Seta muy apreciada por su intenso sabor que en su formato de harina realza al máximo el sabor de tus guisos.
Tiene el sombrero de color pardo, el pie robusto y de color claro, la carne blanca y dura, un olor fúngico muy característico y sabor avellanado.
Potencia y enriquece el sabor de nuestros platos y tienen una durabilidad de dos a tres años.